Cuarentena poblacional
El archipiélago de 24 millones de habitantes había logrado controlar completamente la epidemia durante un año y medio gracias a las cuarentenas a la entrada de su territorio, pero esta estrategia, si bien no colapsó, si obligó a que las autoridades tomaran acción al ponerse al descubierto varios focos contaminantes a mediados de mayo último.
Anuncios por megáfonos, para alternar las compras al mercado de frutas y verduras, las escuelas y los bares cerrados, se convirtieron en el diario de los taiwaneses, escena impensable hasta hace varias semanas atrás.
“Taiwán había tenido mucho éxito en el control de la epidemia con cuarentenas a la entrada “, dijo Chan Chang-Chuan, profesor del Departamento de Salud Pública de la Universidad Nacional de Taiwán. “Pero los protocolos puestos en marcha estaban adaptados al primer tipo de virus y no a la variante inglesa, mucho más contagiosa. Nuestras medidas no tuvieron en cuenta estos cambios”, deploró el científico.
El tema salió a la luz, cuando se encontró un clúster en el distrito obrero de Wanhua, en el centro de Taipei. Se cree que las infecciones se originaron entre los pilotos de la aerolínea de bandera, y por la cuarentena se restringió. Desde entonces, el archipiélago cuenta con entre 300 y 500 casos diarios.
Una cifra que lucha por disminuir a pesar de las medidas del gobierno. “La mayoría de los taiwaneses aún no se han vacunado”, lamenta el profesor Chan. “Así que se necesitarán meses para reducir el número de infecciones a cero. Necesitamos vacunas, muchas vacunas”, concluyó.