Embajador Katayama Kazuyuki
En un mensaje a la comunidad japonesa residente, el embajador Extraordinario y Plenipotenciario Katayama Kazukuyi remarcó que de acuerdo al artículo 1 de la Constitución del Japón, Su Majestad es el “Símbolo del Estado y de la unidad del pueblo de Japón”, elevando oraciones por la salud del emperador Naruhito en su onomástico, por el mayor desarrollo de las relaciones bilaterales y el bienestar de los japoneses y nikkeis.
En ese contexto, el diplomático precisó que guardaba especiales sentimientos hacia el emperador por gratas coincidencias, como que ambos habían nacido en 1960 y el haber tenido la suerte de aprender español con el mismo profesor que también le enseñó al ocupante del Trono del Crisantemo; asimismo, recalcó que en su gestión, entre otros acercamiento peruanos-japoneses, están la entrada en vigor del Convenio Perú-Japón para evitar la doble tributación y que los dos países son miembros del Tratado Integral y Progresivo de Asociación Transpacífico (CPTPP), acuerdo de libre comercio.
Katayama expresó su complacencia por la óptima integración de la comunidad japonesa y sus descendientes en la sociedad peruana, señalando que el Perú es el tercer país del mundo con mayor cantidad de inmigrantes japoneses y el orgullo que ellos y los nikkeis estén cumpliendo un gran rol en la vía del bienestar de la tierra de los incas y de ser puentes entre dos antiguas culturas con vigencia actual.
En su declaraciones, el embajador destacó que en el 2023 se celebrará el sesquicentenario del establecimiento de las relaciones diplomáticas, siendo el Perú el primero en América Latina en hacerlo con Japón, e hizo votos a favor de que los lazos se fortalezcan en su calidad de socios estratégicos.