Propuesta de simplificar trámites nupciales
Foto: Canal 26
Unas 5 000 parejas contrajeron matrimonio simultáneamente en 50 lugares de China, a vísperas de las celebraciones por el 75 aniversario de la fundación de la República Popular China. Fue un día en el que triunfó el amor y el inicio de un capítulo importante en sus vidas. Con el lema “Un festejo de las familias y la nación por la felicidad”, la boda colectiva es la de mayor envergadura jamás celebrada por las autoridades en la historia de la República Popular China.
En 50 puntos en diferentes provincias, regiones autónomas y municipios, el Cuerpo de Producción y Construcción de Xinjiang, las regiones administrativas especiales de Hong Kong, Macao y la región de Taiwán, las 5 000 novias se vistieron de traje tradicional, sostuvieron flores, intercambiaron regalos y leyeron sus votos, informó Noticias de Mujeres de China. Además del compromiso de envejecer juntos, los recién casados propusieron simplificar los trámites nupciales y rechazaron los altos costos de los regalos, reportó el Diario de Beijing.
La relevancia simbólica de este enlace grupal para promover la reforma de las costumbres matrimoniales, una nueva cultura nupcial y la procreación, así como la felicidad conyugal y el valor de la familia fue evidente, continuó el medio. Una pareja de Jian, en la provincia oriental de Jiangxi, declaró que la esencia del matrimonio reside en el amor y el compromiso entre dos personas, mientras que los onerosos “caili”, o regalos esponsales del novio a la familia de la novia, suelen suponer una carga económica para los jóvenes, afectando incluso la alegría de su unión, indicó Noticias de Mujeres.
La –opinión coincidió con la de Yan Huiyin, de la provincia nororiental de Heilongjiang, quien apuntó que encontrar un alma gemela con la que compartir el resto de su vida es siempre el valor esencial del matrimonio. He Yafu, demógrafo con años recolectando registros nupciales, declaró que una de las razones del descenso en la tasa matrimonial nacional en los últimos años es el alto costo de las ceremonias, sobre todo en zonas rurales, donde la práctica del “caili” es más común.