HISTORIA
En sus 70 años de vida institucional, la Asociación Estadio La Unión desea prioritariamente rendir un homenaje a los pioneros forjadores que con gran visión de futuro trabajaron incansablemente para hacer realidad el sueño del campo deportivo, que albergara a los niños y jóvenes nikkei, huérfanos en ese entonces de un lugar para su recreación, a consecuencia de la infausta Segunda Guerra Mundial, que marginó a la colectividad japonesa y a sus descendientes.
EL COMIENZO DE UN SUEÑO
Tras aquellos difíciles años, es cuando surgen los pioneros del Club Pacífico, quienes aprovechando de la visita en 1950 de los nadadores olímpicos japoneses después de su periplo en el Brasil, permiten la presentación en la piscina Nippon, en el antiguo Estadio Nacional, obsequio de la Sociedad Central Japonesa en el año 1935, de los nadadores Hashizumi, Hamaguchi, Murayama y Furuhashi, que no solo concitó la presencia de los japoneses y sus descendientes en las tribunas; sino que después de muchos años se entonaron el Himno Patrio y el izamiento de la Bandera japonesa.
La presentación de los nadadores olímpicos fue exitosa en lo deportivo y económico, el benefactor de nacionalidad brasileña que acompañó a la delegación, Tatsuo Ookochi, donó la suma para cubrir los gastos que demandó la presentación de los deportistas japoneses en Lima, los cuales pasaron a ser los primeros fondos del Club Pacífico para el proyecto que tenían en mente de contar con un campo deportivo. El primer ingreso fue de 150 mil soles de entonces.
De esta manera, el 6 de agosto de 1952 se creó la Comisión Pro Estadio, presidida por don Ichitaro Morimoto. Tras barajarse hasta 16 propuestas de terrenos ubicados en Barranco, Atocongo, Magdalena, Callao, entre otros puntos de la ciudad, finalmente se decidió a la adquisición de terrenos en los fundos Cueva, Buenaventura y anexos, con una extensión de 97,302 m2, con un valor total de S/. 973,020 soles (US$ 57,439 de la época), pagándose al contado 500,000 soles ($29,516) y 10 letras por un monto total de 492,532.11 soles ($29,075), siendo finalmente el costo de US$ 58,591.
Para la limpieza del terreno, llamado cariñosamente “La época de las piedritas”, se requirió del esfuerzo y ayuda de la colectividad, desde la nivelación hasta el deshierbado. Que los ahora, ya no tan jóvenes de antaño narran con emocionada y nostálgica ternura, lo que costó sudor y lágrimas; donde el trabajo solidario hizo que este campo guarde en sus entrañas, ese espíritu inmenso llamado kimochi.
La primera piedra del futuro campo deportivo se colocó el 8 de noviembre de 1953. Apadrinaron el acto el general Carlos A. Miñano, presidente del Comité Consultivo de Deportes, y Ko Shioya de Morimoto. El nombre del ‘Estadio La Unión’ fue inspiración de la Sra. Matilde Kutsuma de Tomita.
Precisamente ese día, luego de esta ceremonia, se inauguró el primer campeonato de fútbol, habilitándose dos campos. Participaron 22 equipos divididos en dos series.
Tras 12 fechas de partidos sumamente luchados, el torneo llegó a su fin el 24 de enero de 1954, teniendo como primer campeón al equipo de Diamante. Su capitán, Guillermo Fuyeda, recibió el trofeo ‘Takeo Ozawa’ (Encargado de Negocios de la Embajada de Japón) de manos de don Ichitaro Morimoto, primer presidente de la institución.
EL DEPORTE Y VALORES COMO PILARES FUNDAMENTALES
Desde su fundación hasta el día de hoy, la práctica del deporte y los valores son la piedra angular de AELU, la cual la he llevado al sitial que tenemos actualmente, ser uno de los clubes deportivos más importantes y modernos del país, honrando siempre las palabras del primer presidente y fundador, don Ichitaro Morimoto, en su discurso inaugural:
“El campo deportivo La Unión, ha de responder a la época en que vivimos, y ha de servir no solo de escenario de superación del atleta y del deportista, sino que ha de constituirse en un templo cívico en el que se hará realidad el lema ‘mente sana en cuerpo sano’, necesario en las nuevas generaciones, que son la esperanza del mañana”.
Ese, apenas fue el inicio de ese sueño llamado AELU, el cual se materializó gracias a la voluntad y labor abnegada de sus fundadores. Ya en los siguientes años, el Estadio fue forjando su destino, gracias a importantes momentos, como los pasos de Sociedad Anónima a la transferencia a la Asociación Estadio La Unión con cambio estatutario, obras en infraestructura, acuerdos importantes como el Convenio Tripartito con el Colegio Cooperativo La Unión y la Cooperativa de Ahorro y Crédito AELU – AELUCOOP, ambas creadas gracias al apoyo decidido de AELU. En el año 1971 se funda el Colegio para dotar de una escuela a los niños y jóvenes asociados y de nuestra colectividad, y en el año 1980 AELUCOOP, forjada como el brazo financiero de la institución.
AELU también promovió la creación de entidades internacionales como la Asociación Panamericana Nikkei – APN y la Unión Internacional de Institución Nikkei -UNICIN.
Asimismo promovió alianzas importantes como con APJ para la creación del Centro Girasoles, recibiendo el apoyo de la embajada de Japón, de JICA y Municipalidad de Pueblo Libre.
El desarrollo de los eventos deportivos, sociales y culturales nacionales e internacionales, la formación de los órganos de apoyo, etc. Toda una gama de actividades, crecimiento en infraestructura, escenarios de grandes eventos y la importancia de la labor desarrollada por las Juntas Directivas de los diferentes periodos para materializar las obras proyectadas.
Colocación de la primera piedra, siendo padrinos el general Carlos A. Miñano, presidente del Comité Consultivo de Deportes, y Ko Shioya de Morimoto, esposa de don Ichitaro Morimoto
Entrega del Trofeo “Takeo Ozawa” en el primer campeonato de fútbol